Autores: Speranza S Armando, Tomas Ramos, Miguel Arellano, Hermes Rondón. Centro de Ingeniería Eléctrica y Sistemas (CIES). FIIIDT.
El Centro de Ingeniería Eléctrica y Sistemas (CIES) de la Fundación Instituto de Ingeniería está en capacidad de ofrecer a las MIPYMES, un conjunto de orientaciones sobre las directrices necesarias que permitan desarrollar un Plan de Mantenimiento elemental y resumido, con el fin de poder preservar los equipos, maquinarias e instalaciones de las que disponen. Cada plan debe tener como aspectos fundamentales:
- Proporcionar los conocimientos básicos y un instructivo práctico para la iniciación y ejecución de un Plan de Mantenimiento.
- Garantizar la máxima disponibilidad de las maquinarias, equipos e infraestructuras, en función de un mayor aprovechamiento de las rutinas productivas y al menor costo posible.
- Orientar en los pasos lógicos para la implantación de un Plan de Mantenimiento que incluya todas las funciones que lo comprenden.
- Crear una cultura hacia la prevención para los usuarios y así disminuir los fallos imprevistos.
- Prolongar y preservar la vida útil de los recursos al servicio de la MIPYME.
- Lograr la participación y proactividad de los involucrados para el enriquecimiento del Sistema de Mantenimiento.
Principios Básicos del Mantenimiento.
Cuando la confiabilidad del equipo es la meta, la situación óptima es cero averías y el mejor lugar para comenzar está en el entrenamiento básico sobre esta área. Mientras la posibilidad de cero averías parece poco realista para algunos, para otros es el objetivo de mayor preocupación, especialmente en organizaciones donde las exigencias de calidad en sus programas de mantenimiento son elevadas.
Estudios estadísticos y técnicos en torno a qué situaciones contribuyen con la ocurrencia de averías, señalan que los principios básicos son precisamente donde muchos programas de mantenimiento fallan en su objetivo. Estos Principios Básicos están conformados por tres categorías:
- La Limpieza de los Equipos.
- Procedimientos de Sujeción.
- Procedimientos Apropiados de Lubricación.
Examinar estas tres áreas ayudará a explicar por qué los Principios Básicos del Mantenimiento son tan importantes y por qué tantas averías en los equipos reparados son relacionadas al descuido de éstos.
- La Limpieza de los Equipos.
Considere las siguientes razones para mantener un equipo limpio: Inspecciones más fáciles, mejor moral del empleado, atención más fácil, menor uso en partes móviles, menos contaminación de productos y mejor impresión por parte de clientes. Mientras estas razones son válidas, ¿Qué pasa con las razones técnicas para mantener el equipo limpio?, por ejemplo, considerar los componentes tales como los motores, engranes, y sistemas hidráulicos, ¿Por qué se deben mantener limpios?.
Una razón es la disipación del calor, si un motor llega a estar sucio, la superficie del motor llega a ser menos capaz de disipar el calor, o sea el motor funciona más caliente. La mayoría de los fabricantes permiten mostrar en sus manuales curvas de temperatura en relación a la vida del equipo. Cuando aumenta la temperatura, la vida disminuye, es verdad que el motor no fallará inmediatamente, pero, ¿Qué pasa si ahora el motor da 6 meses de servicio ininterrumpidos, cuando debería prestar 10 años de servicio?; descuidar la limpieza crea fallas innecesarias en el motor y gastos innecesarios por mantenimiento.
El escenario es semejante para casos de engranes (por ejemplo piezas interna de una máquina de coser), si éstos llegan a estar sucios, la disipación del calor disminuye y si usted está utilizando el lubricante sugerido por el fabricante, pues con esta situación será ahora el lubricante incorrecto, ya que los parámetros de operación son diferentes (el sucio se mezclará con el lubricante), debido a que la viscosidad será demasiado delgada y los engranes se gastarán más rápido, el engrane no fallará inmediatamente, pero si fallará una vez cada 6 meses, en vez de una vez cada 6 años, acarreando así gastos innecesarios por mantenimiento.
Considere también, los sistemas hidráulicos, los depósitos se diseñan con suficiente área para disipar el calor generado durante la operación. Si la suciedad se forma en el tanque, el líquido hidráulico retiene el calor, y por encima de los 1.250o F ó 1.3000o F dependiendo del líquido hidráulico y sus aditivos, la vida del aceite es acortada en un 50% por unos cuantos grados de aumento en la temperatura. Cuando la temperatura del aceite continúa aumentando, el líquido se polimeriza (se plastifica) y estas partículas polimerizadas pueden viajar por el sistema hidráulico y causar que las válvulas y otros componentes se atasquen y por consecuencia fallen; otra vez, las fallas no son inmediatas, pero ocurren con el tiempo.
Éstos son tan solo tres ejemplos de tantos que pueden ser posibles para ilustrarnos la importancia de mantener el equipo limpio. ¿Cuántos operadores que comprenden las razones técnicas de la limpieza en los equipos realmente la practican?. Para asegurarnos que las actividades de mantenimiento son gastos justificados, el entrenamiento básico sobre los principios del mantenimiento deben abordar estos temas críticos.
- Procedimientos de Sujeción (Ajuste Mecánico).
Muchos técnicos de mantenimiento están familiarizados con los procedimientos de reensamble de diversas máquinas (motores eléctricos, mecánicos, de medición, de pesaje, entre otros), un ejemplo, es el de instalar el bloque mecánico de una máquina de costura a su depósito de aceite, este procedimiento exige el cierre del bloque al depósito por medio de sus pernos principales, esta es una operación crítica porque sella los compartimientos de aceite de la máquina, ¿Habrán visto algún mecánico calificado utilizar un cuchillo para este trabajo?, imagino que no, porque un mecánico experto utiliza la herramienta adecuada para instalar los pernos principales, siendo las más empleadas: Destornilladores de pala, de estría y llaves hallen.
Lo anterior, es un hecho mecánico puntual, aunque es improbable que la mayoría de los pernos al instalarse sean apretados con un cuchillo, en vez de las otras herramientas ya mencionadas, el resultado negativo sería que estos sujetadores pierdan fuerza, vibren, se desgasten y finalmente fallen, todo porque los principios básicos fueron ignorados, por eso es fundamental que los programas de entrenamiento básico de mantenimiento, enseñen las técnicas básicas de sujeción.
Fíjense de los patrones en las cabezas de los pernos o de los sujetadores, si alguien abriera los acopladores en su planta, ¿Cuántos acopladores tendrían tuercas mal apretadas?, una tuerca mal apretada se desgasta constantemente, esto genera alargado del agujero del acoplador y el resultado es la falla del acoplador; de manera que, al prestarle mayor atención a los principios básicos resultará en menos averías.
- Lubricación.
En la práctica, ¿Qué tan común es que el lubricante apropiado sea aplicado en la cantidad correcta, con la frecuencia necesaria y con la herramienta adecuada? ¡Pocas veces! ¿Cierto?, aun así un alto porcentaje de las fallas mecánicas (cojinetes, cadenas, engranajes y correas) son relacionadas a la mala lubricación. Un ejemplo de esto, sucede cuando aplicamos aceite lubricante a una máquina, sin observar el visor, se aplica el fluido y se inicia el arranque para verificar la fluidez interna en todo los mecanismos, pues resulta, que la máquina ya no está lubricada, sino inundada y ese excedente de aceite provoca dificultad de arranque, mayor desgaste por dificultad de calentamiento, descalibración y bote en el depósito por sobre-nivel del fluido, lo que se transforma en pérdidas y por tanto en gastos innecesarios.
Con todo lo planteado, podemos imaginar los resultados si se pudieran eliminar las averías provocadas por la falta en la limpieza, sujeciones incorrectas y procedimientos impropios de lubricación, a sabiendas que muchas de las averías de un equipo o maquinaria tiene una causa de raíz en una de estas áreas mencionadas.
En general, la mayoría de las organizaciones no se preocupan por los principios básicos del mantenimiento, pero con políticas gerenciales acordes, un correcto entrenamiento en los principios básicos para todas las personas involucradas en el mantenimiento y una modesta inversión de recursos, sería crucial para progresar hacia la disminución de averías.
Referencias:
[1] BALDÍN A., FURLANETTO L., ROVERSI A. Manual de Mantenimiento de Instalaciones Industriales, Editorial Mc Graw Hill, España, 2000.
[2] OROPEZA, Iván y CARLETTI, Roberto. Mantenimiento Industrial Tomos 1 y 2, UNA, 1983.
[3] VILLANUEVA Dounce, Enrique. La Productividad en el Mantenimiento Industrial, Editorial Cecsa, Sexta Edición, México, 2004.
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