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Agricultura de precisión en Venezuela: Retos ante el COVID-19 (Parte 2)

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Autora: Desirée Yaguare / Centro Nacional de Teledetección con fines agrícolas CENATEL- FIIIDT.

 

2. Aplicaciones de la Agricultura de Precisión

Las herramientas de teledetección son alternativas para el control de cultivos en situaciones excepcionales, como la que atravesamos producto de la pandemia y la cuarentena decretada en marzo, esta paralización de actividades no esenciales exime las empresas y trabajadores que producen o comercializan alimentos.

En este caso las medidas de higiene y distanciamiento social deben extremarse también en el campo, más allá del uso de equipos de bioprotección por parte de los agricultores, debe considerarse la continuidad de las cadenas de distribución, el cumplimiento de normas sanitarias que garanticen la inocuidad de los alimentos, la cadena de frío en los casos que los requiera, y más allá de estas premisas las consideraciones técnicas pertinentes para garantizar la estabilidad de la producción tanto a los pequeños como  medianos productores.

La labor de los agricultores resulta fundamental para asegurar el abastecimiento de alimentos, pero, ¿Cómo se puede minimizar los traslados de quienes se dedican al sector primario? En este punto la agricultura de precisión puede ser una alternativa para el control de cultivos a distancia y minimizar la movilidad de gran parte de los trabajadores sin abandonar los campos.

Figura 1. Imagen Agricultura inteligente. Fuente https://www.fertiberia.com/es/blog/2017

Sin embargo, en nuestro país la aplicación de estas tecnologías y la inclusión de ellas por parte de productores locales y regionales tienen mayor rezago con respecto a otros países, de igual manera aplicar estas tecnologías en los entes oficiales encargados de la supervisión de predios agrícolas, cumplimiento o ejecución de créditos agropecuarios tendrían en estas herramientas una alternativa para su gestión eficiente, disminuyendo los riesgos sanitarios.

A la fecha en una encuesta realizada por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y Alimentación (FAO)  en quince países de América Latina y el Caribe durante el mes de junio, afirma que el 92% de los mercados mayoristas reportaron una disminución de las compras por parte de hoteles, restaurantes y otros tipos de servicios, mientras que el cierre parcial y las restricciones afectan el 32% de los mercados mayoristas y al 22% de los minoristas.

La mencionada encuesta realizada por la FAO y la Federación Latinoamericana de Mercados de Abastecimiento (FLAMA), se aplicó a 64 mercados mayoristas de 15 países entre ellos, incluida Venezuela, de los cuales el 73% de los mercados mayoristas indicaron el uso de aplicaciones o plataformas digitales para la comercialización de alimentos, mientras que el 50% de los mercados implementó convenios con empresas de entregas para realizar envíos. Lo anterior ejemplifica la importancia de la adaptación de las diferentes tecnologías como apoyo a la actividad agrícola.

Han existido iniciativas por parte del Estado para resaltar  la importancia de las TIC en la agricultura y estimular la adquisición de las mismas no sólo en los productores sino también en los entes encargados de la supervisión y gestión del sector en el país, sin embargo, aún no ha calado su implementación en el agro ya que deben existir un mínimo de requerimientos técnicos que garanticen su eficiencia. Para lograrlo, es indispensable la actualización y automatización de procesos, difusión oportuna de la data y personal calificado para ejecutarla. Ante ello es imperante la formación especializada que dé continuidad al relevo generacional, es también un factor que debe considerarse para hacer una implementación eficiente de la agricultura de precisión en los diferentes niveles de gestión.

Algunos de estos requerimientos mínimos pasa por la adecuación de equipos de medición y el adiestramiento del personal técnico no sólo en lo conceptual, sino en el manejo de los datos satelitales, captación a través de diversas herramientas como lo es la gestión de datos con diversas fuentes de captura, drones, datos satelitales, aplicaciones móviles, entre otros.

Figura 2. Imagen referencial (Fuente: http://www.fgombau.com/teledeteccion-en-agricultural-irta/,2015)

Para apoyar a los agricultores y organizaciones de producción local en los próximos meses,  es importante establecer planes de coordinación institucionales que permitan desarrollar estas alternativas, en el caso de la Fundación Instituto de Ingeniería, cuenta con la capacidad de asesorar y atender articuladamente con otras instituciones la atención al sector agropecuario, incluyendo la capacitación a técnicos como un servicio para optimizar la gestión de diversos entes públicos a través de la implementación de diversas alternativas tecnológicas.

Otra buena práctica sería identificar centros de recolección más cercanos a los productores, por ejemplo, desarrollar instalaciones de almacenamiento como plataformas de sistemas de recepción de almacenes donde los agricultores puedan entregar sus productos sin necesidad de ir a los mercados, hacer control en tiempo real de distribución de la producción y reubicación de insumos a través de SIG, es una de las tantas aplicaciones de la geomática en la gestión de recursos.

Incorporar en el campo venezolano la agricultura de precisión permitirá reducir costos, emplear la cantidad precisa de recursos y minimizar el daño ambiental, todo ello impacta positivamente en la reducción de los desplazamientos, incorporación de herramientas de teletrabajo para la automatización de tareas diarias y, por tanto, disminución del riesgo de contagio, manteniendo en los campos de cultivos sólo al personal esencial.

 

Referencias

 

Contacto: desireeyaguare@gmail.com

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