La ciencia, la curiosidad y la diversión en vacaciones, son tres factores que han logrado unirse en el Polo Científico Tecnológico Venezolano con la visita de miles de niños y niñas, pertenecientes al Semillero Científico, que forman parte del Plan Vacaciones Científicas y Tecnológicas.
Junto a los investigadores, durante el recorrido llevado a cabo en las instalaciones de la Fundación Instituto de Ingeniería, los pequeños semilleros aprenden no solo de ciencia y tecnología, sino también la importancia de los puntos cardinales para orientarse.
“Lo primordial es que los niños y niñas puedan aprender cosas importantes para su vida y el futuro; en esta estación, por ejemplo, se les explica lo que es una brújula y su relación con el campo magnético”.
Así lo explicó María Quijada, trabajadora de la Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit) y Jefa de la Estación “Campo Magnético”, quien además resaltó el interés que han tenido los más pequeños, que han sido participativos y atentos.
Tras realizar una breve explicación, los niños y las niñas ponen a prueba sus conocimientos, creando una brújula casera utilizando elementos como objetos magnéticos, anime; agua y un imán, actividad hecha con trabajo en equipo.
Abraham Velásquez, joven semillero, expresó que “me gustó mucho aprender sobre las brújulas, fue divertido y es importante saber sobre esto por si vamos con nuestra familia a alguna excursión”.
