En las últimas semanas, el Sol ha mostrado una intensa actividad, culminando con una poderosa llamarada solar de clase X2.7 registrada alrededor del 14 de mayo de 2025. Este evento, detectado por observatorios espaciales, ha tenido efectos notables en nuestro planeta, principalmente en las comunicaciones por radio de alta frecuencia, señales de navegación, redes eléctricas y hasta afectaciones para las naves espaciales.
Desde la NASA, se informó que entre el 13 y 14 de mayo, este fenómeno llegó a su punto más alto, a las 4:25 am ET (tiempo del este). El Observatorio de Dinámica Solar de la NASA logró capturar una imagen de estas “llamaradas”.
Entre sus consecuencias ubicamos apagones de radio que afectaron regiones de Europa, Asia y Oriente Medio, lo que subraya la conexión directa entre la actividad solar y nuestra tecnología. Es por ello que especialistas se encuentran monitoreando la situación.
Por su parte, esta actividad solar también deja a su paso hermosos escenarios como las auroras boreales y australes, las cuales pueden intensificarse y llegar a visualizarse en latitudes menos comunes.
La comunidad científica internacional continúa estudiando estos fenómenos para comprender mejor su dinámica y predecir sus efectos en nuestro planeta, resaltando la importancia de la investigación espacial y la protección de nuestra infraestructura tecnológica.
Fuente: Prensa FIIIDT
