Orégano es el nombre común de varias especies de plantas, siendo las dos más habituales el Origanum vulgare (nativo de Europa) y el Lippia graveolens (originario de México;) sin embargo, esta planta es posible encontrarla de diversas formas en todo el mundo, siendo la más usual en Venezuela la Lippia Micromera. Estas especies comparten características similares sobre todo en su composición química, que, aunque sus concentraciones varían debido a diversos factores como clima, altitud, entre otros, se encuentran presentes en todas ellas.
Los componentes químicos principales son: el limoneno, beta-cariofileno, ρ-cimeno, alcanfor, linalol, alfa-pineno, carvacrol y timol (1), siendo los dos últimos la principal razón de sus propiedades antifúngicas. Esto se debe a que estos fenoles (Figura Nro. 1) tienen un efecto sinérgico antimicótico, ya que, al entrar en contacto con el hongo, tienen la capacidad de alterar su estructura morfológica, retrasando y reduciendo el desarrollo del mismo, al producir la lisis entre la membrana y la pared celular del hongo (2).
Figura Nro. 1: Estructura química del carvacrol y el timol (2).
La interacción de estos compuestos con la bicapa lipídica provoca la disrupción de la membrana, lo que resulta en la fuga de diversos componentes, entre ellos el ergosterol, dejando al hongo con una incapacidad para regenerar la pared celular (Figura Nro. 12 Además, el timol y el carvacrol interactúan con algunas enzimas, que son cruciales para el metabolismo de este organismo, todos estos factores combinados llevan a la muerte del hongo (3) (4).
Figura Nro. 2:Mecanismo antifúngico del Timol y Carvacrol (2).
En los últimos tiempos, estos fenoles han causado gran interés por sus diversas propiedades, en especial por su actividad antimicótica contra fitopatógenos del suelo como el Fusarium oxysporum, el cual es un hongo que puede vivir en los suelos por 20 años y causa severos daños a los sembradíos, provocando la podredumbre de las raíces y cuellos de las plantas. En la figura Nro. 3 se observan los síntomas internos causados por este hongo en donde A y B son los haces vasculares afectados en el rizoma con fibras amarillas; C es la coloración amarilla característica en la zona afectada; D, cortes desde el exterior para la observación de síntomas en la cabeza; E, haces vasculares afectados en el pseudotallo; F, haces vasculares afectados en el eje del racimo (5).
Figura Nro. 3: síntomas internos producidos por el Fusarium (5)
Este tipo de hongo en específico ha causado gran preocupación a nivel mundial por su capacidad de desbastar las tierras de cultivos, ya que este puede generar un daño de entre un 60% a 100% de los mismos, situación que en la actualidad es muy alarmante (4).
Venezuela, no se encuentra exenta de esta circunstancias, sobre todo porque el Fusarium Oxysporum es una de las principales causas de la marchitez de las musáceas (plantas de bananos), lo que es inquietante dado que este fruto es una de las fuentes primordiales de alimentación en el país. Por otra parte, es importante acotar que, sin un control adecuado de este hongo, las consecuencias que se enfrentarían serían pérdidas económicas en la producción y sostenibilidad agrícola e impacto en la seguridad alimentaria (1). Debido a lo anterior, el sector agrario se ha decantado en emplear fungicidas sintéticos, que, aunque cumplen su función tienen un impacto negativo tanto para la naturaleza como para los consumidores ya que muchos son clorados, fosforados e inclusive nitroderivados (4).
Es por ello que se han investigado opciones más amistosas para con el ecosistema. Los aceites esenciales y los concentrados de orégano son una de las opciones más atractivas gracias a sus altos contenidos de timol y carvacroll (2); sin embargo, la obtención de aceites esenciales puede ser de alto costo y bajo rendimiento, y los concentrados, aunque eficaces, requieren de un añadido que ayude a repotenciar el efecto antifúngico para ser comparado con los fungicidas sintéticos. En este punto, los científicos se plantearon la utilización de nanopartículas de cobre que, basados en diversos estudios, han demostrado que la gran superficie de contacto de las mismas y a los iones metálicos que liberan generan especies reactivas de oxígeno, lo que les confiere propiedades antimicrobianas y antifúngicas sobre todo para hongos fitopatógenos como el Fusarium Oxysporum (6); entonces, será posible desarrollar nanopartículas de cobre que se encuentran recubiertas por un extracto de la especie de orégano Lippia Micromera, para aumentar la efecto antimicótico de los terpenos timol y carvacrol contra el hongo Fusarium Oxysporum de las plantas de banano. En una próxima entrega se describirá el proceso de sínteis de nanopartículas de cobre estabilizadas con orégano para evaluar actividad antifúngica.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
- El Oregáno: Propiedades, composición y actividad biólogica de sus componentes. Arcila-Lozano, C., y otros. 1, s.l. : Archivos Latinoamericanos de Nutrición, 2004, Vol. 24, págs. 100-111.
- Antimicrobial activity of nanoformulations of carvacrol and thymol: New trend and applications. Hajibonabi, A, y otros. Tabriz : s.n., 30 de junio de 2023, OpenNano, Vol. 13, págs. 1-21. 2352-9520.
- Impaired ergosterol biosynthesis mediated fungicidal activity of Co(II) complex with ligand derived from cinnamaldehyde. Shreaz S, Shiekh RA, Raja V, Wani WA, Behbehani JM. Marzo de 2016, Chem Biol Interact., págs. 64-74. Epub. PMID: 26806515..
- Actividad antifúngica del aceite esencial y extracto acuoso del orégano Lippia palmeri W. sobre Fusarium oxysporum y Thanatephorus sp. Biotecnia. VALENZUELA-QUINTERO, Genesis et al. 2, 2023, Biotecnica, Vol. 25, págs. 153-158. Epub. 1665-1456.
- Estudio sobre el mal de Panamá causado por Fusarium oxysporum f. sp. cubense en cultivos de platanera de Tenerife. Informe técnico nº5. Perera González, S., y otros. Canarias : GMR, 2023, Vol. 56 p.
- Síntesis de nanopartículas de cobre para el control de hongos fitopatógenos. Nicolaza, L, y otros. 2, Veracruz : s.n., 2018, Vol. 15.
Fuente: Centro de Tecnología de Materiales (CTM)