El desafío de recordar: avances en la lucha contra el alzhéimer

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Por: Gabriela Jiménez Ramírez

Hablar del alzhéimer es hablar del desafío de la memoria, de ese puente invisible que une nuestra historia personal con nuestra identidad colectiva.

Esta enfermedad neurodegenerativa representa uno de los mayores retos de la medicina contemporánea, pues afecta principalmente a las personas de edad mas adulta  y se manifiesta con la pérdida progresiva de la memoria y de las capacidades cognitivas.

En la comunidad científica internacional se abren caminos de esperanza. El neurólogo y académico Vladímir Parfénov, en entrevista para el portal Nauchnaya Rossiya (Rusia Científica), nos recuerda que este trastorno tiene su origen en la acumulación de proteínas amiloides en el cerebro, un proceso silencioso que puede iniciarse incluso dos décadas antes de que aparezcan los primeros síntomas. Entre las señales de alerta más comunes se encuentran la dificultad para recordar hechos recientes, la repetición de preguntas y el deterioro del lenguaje.

Parfénov destaca que los avances científicos han permitido desarrollar nuevas herramientas de diagnóstico, como el estudio de marcadores biológicos en el líquido cefalorraquídeo. “El uso de estos marcadores se está incorporando gradualmente a la práctica clínica”, afirma el especialista. A su vez, la investigación continúa con la búsqueda de marcadores en el suero sanguíneo y la aplicación de la tomografía por emisión de positrones.

La investigación farmacológica también ofrece señales alentadoras. Medicamentos como el lecanemab y el donanemab han mostrado resultados significativos al retrasar los trastornos cognitivos graves de dos a tres años. Esto significa que una persona diagnosticada puede conservar durante más tiempo su vida cognitiva y creativa, su capacidad de amar, de reconocer, de recordar.

Como bióloga e investigadora, me emociona ver como hoy sabemos que el tratamiento del alzhéimer no se limita a los fármacos: comienza en los hábitos cotidianos, en la prevención, en el cuidado de la mente y del cuerpo. La actividad física, la estimulación mental, el control de la presión arterial, del azúcar en sangre y del colesterol, así como el descanso adecuado y la salud emocional, son pilares fundamentales para mantener la vitalidad cerebral.

En Venezuela, asumimos este compromiso con profunda responsabilidad. Desde el Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología, impulsamos la investigación, la formación de profesionales y el desarrollo de tecnologías orientadas al estudio y atención de enfermedades neurodegenerativas. Trabajamos en cooperación con naciones aliadas, fortaleciendo nuestras capacidades científicas y consolidando un modelo de salud con soberanía y humanidad.

La ciencia no solo salva vidas: la ciencia también  acompaña, y construye bienestar social.

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