Colón el marrano, las 12 claves de Carlos Brandt
En octubre de 2024, el día del mal llamado aniversario del “descubrimiento de América”, la Universidad de Granada-España, publicó los resultados de un estudio que adelantaban por mas de 20 años, donde a través de pruebas genéticas aseguran que Cristobal Colón era de origen judío, la noticia dio la vuelta al mundo y desde ese momento son cientos los reportajes, conferencias académicas y documentales que le avalan esta tesis lograda “gracias a los progresos de la ciencia”, a través de copiosas bases de datos que almacenan las secuencias genéticas características de diferentes pueblos, realizan extensas comparaciones con inteligencia artificial entre la secuencias de ADN del personaje investigado y los referidos datos, hallando la mayor cantidad de similitudes con los judíos españoles, los detractores de este resultado alegan que no hay certeza que las muestras de ADN usadas correspondan realmente “al genovés”. Lástima que nadie recuerde el magnífico texto publicado en 1949, es decir 75 años antes del estudio genético, donde el más célebre pensador latinoamericano de la época, demostraba con pruebas documentales el marranismo de Colón. Se trata de la obra “El misterioso Almirante” de Carlos Brandt Tortolero, insigne venezolano de fama mundial nacido en 1875.
Para los que como yo no conocen la definición, se les llamaba “marranos” a los judíos que fingían ser convertidos al catolicismo para escapar de las hogueras de los tribunales de “la Santa Inquisición”, eran católicos por fuera pero judíos por dentro, “falsos conversos” se les llamaba también. El gran filósofo venezolano en su obra de 196 páginas, publicada en 1949, como parte de la “Biblioteca Popular Venezolana”, dedicada por cierto a otro gran científico Venezolano: Humberto Fernández-Morán, analiza el perfil psicológico del Almirante así como las cartas y escritos que se conservan de él, dando al menos 12 claves que demuestran el origen judío del Almirante, ¡con inteligencia natural hace más de 75 años!. Compartimos a continuación con citas textuales, el resumen de las claves de “El Misterioso Almirante”, del cual no podemos dejar pasar por alto las primeras 4 líneas:
“Dedicado al Dr.
HUMBERTO FERNÁNDEZ-MORAN
Uno de los escasos y mas altos valores auténticos
de la Intelectualidad Venezolana”
- El “genovés”, “que nació en Génova, estudió en la universidad de Pavia” pero… ¿que no habla italiano?
Destaca la obra “El misterioso Almirante” diversas pruebas de finos análisis lingüísticos que desmostarían que Colón no hablaba italiano ni ninguno de sus dialectos. Por ejemplo, al referirse por escrito a Américo “Vespuchy”, siendo que la “y” es un caracter que no existe en idioma italiano y sobre todo la terminación “chi” se lee en italiano “qui” la grafía usada por el Almirante señalaría a ¿Vespuqui?. Resalta Brandt: “Nuestro genovés y sus genoveses hermanos no hablaban entre si sino unicamente en castellano”(1), señala también comentarios escritos en español por el almirante al pie de documentos impresos en italiano, ¿Quien comenta su idioma materno en otro idioma?.
- Dominio casi prosaico del idioma español,
Brandt así como otros autores resalta el importante nivel de la lengua española alcanzado por el Almirante, “aportuguesado” pero jamás con rasgos de italiano. Considerando que todas las crónicas así como las auto descripciones del Almirante le adjudican haberse iniciado en las artes de la navegación desde muy niño, ¿Como podría aprender el español de forma tan perfecta a bordo de un barco si en realidad era “genovés”?
- “Colombo” el que asegura que su único linaje es “de Colón”,
Señala Brandt una referencia al documento de “Mayorazgo”, es decir, el documento donde se declara el título de nobleza española hereditaria que le confirieron a Colón los Reyes Católicos a cambio de sus servicios a la corona, allí se indica que solo podían reclamar dicho privilegio sus comprobados parientes que se apellidaran “de Colón”, ¿Porqué no puso Colombo, si se supone que él era “Chistoforo Colombo”?. Señala Brandt, que “ese “de” judaico provino de que cuando algún inmigrante judío llegaba a alguna ciudad por primera vez, para simplificar – su muchas veces extraño apellido – se dejaba llamar por el nombre de donde procedía. Así p. e. Benedicto de Espinoza, Abraham de Córdoba; Isaac de Castro, etc.
Por otra parte la idea de que el apellido Colombo se hubiera castellanizado en Colón, es inexplicable puesto que Colombo puede ser castellano también y, en efecto así se llama en nuestro idioma la raíz de una planta.”(2), “también hemos visto que ese apellido, así con el prefijo de, aparece frecuentemente en las tumbas de antiguos cementerios judíos de Galicia”(3)
- Le hace un donativo secreto a un judío
“En el mencionado Mayorazgo dispone Colón que se le pasara una pensión de un marco de plata a cierto judío del Ghetto de Lisboa. ¿Qué cristiano que no hubiera tenido sangre judía se habría atrevido en aquellos tiempos a hacer público semejante donativo? Lo más curioso en el presente caso, es que el Almirante tuvo la precaución de agregar: “ No quiero que se sepa que soy yo quien hizo ese donativo”(4)
- Colón asegura que fueron los judíos los que enseñaron a los demás pueblos la navegación,
“-Todos los pueblos recibieron el principio de astronomía de los judíos-…¿Qué cristiano que no tuviese sangre judía en sus venas se habría atrevido a escribir tan jactanciosa frase en la España de entonces? ”(5)
- El apodado Faraón
“El Rey Faraón era el nombre que Trasatierra le daba al Almirante, pues Faraones era el mote de los Colones en la Española. Nadie parece haberse fijado en este hecho curioso y sin embargo, tiene especial significación hallar este vocablo en la pluma de un franciscano. Sabido es que los franciscanos eran entonces los sostenedores del antisemitismo y que el famoso libelo antisemitista de aquel siglo, las coplas del Provincial, era sin duda engendro franciscano. Vayamos pues a las famosas coplas y allí encontraremos estos cuatro versos:
“A tí, frayle bujarrón
Alvaro Pérez Orosco
En la naríz te conozco
Por ser de los de Pharon”
… Faraón en la jerga franciscana quería decir Judío!”(6)
- Firma con un triángulo ¡la base de la cruz de David!
“Fuera de que alguna que otra vez, y por andar de prisa firmara El Almirante, nunca llegó a emplear otra firma que el conocido logogrifo, el que consiste en un triangulo formado con letras. Es oportuno recordar que el triangulo doble, el hexágono, es el conocido símbolo hebraico. He aquí como firmaba el Almirante:”(7)
- Expulsado de Portugal “por otras causas más graves”
Brandt considera que el origen judío del Almirante logró mantenerse oculto ya que su difusión perjudicaba mas a los Reyes Católicos, quienes obviamente conocían las circunstancias, por haber nombrado Virrey a un marrano, así crearían un “Secreto de Estado. Recuérdese ahora que a Colón lo echaron de Portugal por “deuda y algo peor”. Ya sabemos que podía ser ese algo peor que ni siquiera se atrevían a mencionar por su verdadero nombre… esto es: origen judío!”(8)
- En las cartas privadas a su hijo Diego encabeza con siglas de una oración judía
“sus cartas las solía encabezar Colón, con una cruz en la parte alta, como era entonces costumbre entre los cristianos. Pero cuando a quien le escribía era a su hijo Diego, entonces, además de la mencionada cruz, a la derecha de esta, estampaba un monograma formado por las letras hebreas “Beth Hay” y que según el historiador David, implica el comienzo de una antigua oración hebrea.
… las trece cartas que el Almirante le escribió a su hijo Don Diego. En todas aparece dicho monograma hebreo, menos en una sola de esas cartas y en la cual le decía al hijo, que se le mostrara a la Reina! ¿No es esto evidente prueba de marranía?”(9)
- “El extranjero” que nunca se nacionalizó
Resalta Brandt, “He aquí otro dato interesante: Magallanes, Bocanera, Américo y otros navegantes extranjeros se naturalizaron españoles para poder obtener el entonces codiciado título de Piloto Mayor Español. Sin embargo a Colón (que así lo llamaremos para seguir la costumbre), no se le exige el requisito de naturalizarse, para nombrarlo nada menos que Virrey y Almirante Mayor de la Mar Oceano!!…”(10)
“No obstante de acostumbrar hablar mucho de si mismo, el Almirante nunca declaró que era genovés, sino una sola vez y en la forma bastante ambigua que aparece en el Mayorazgo. Tampoco sus Reyes le dijeron jamás genovés. Sus hijos lo llamaban “El Almirante”. Refiriendose a sí mismo, frecuentemente se decía extranjero, a la usanza judía de entonces: “miembro de otro pueblo, de otra cultura””(11)
- El círculo de judíos conversos hábiles en las finanzas de la corona
“Si un católico decía que iba a darle la vuelta al mundo por amor a la ciencia, lo quemaban vivo; más si un judío decía lo mismo, pero con fines lucrativos para el Gobierno, entonces ya eso era otro cantar… Los judíos hábiles en finanzas gozaban de toda clase de garantías”(12)
- Reclama por los “judíos expulsos”
En una carta dirigida a sus Reyes el Almirante expresaría “Así que después de haber echado fuera a todos los judíos de vuestros reinos y señoríos, en el mismo mes de Enero, mandaron Vuestras Altezas ami que con armada suficiente me fuese a las dichas partidas India, y para ello me hicieron grandes mercedes, y me ennoblecieron que dende en adelante yo me llamase Don, y fuese Almirante Mayor de la Mar y el Océano y Virrey y Gobernador Perpetuo de todas las islas de Tierra…”, comenta Brandt en su obra: “¿Qué tienen que ver los judíos echados de España con el viaje de Colón, para que éste los cite en su mencionada carta?…¿No sería esta una protesta del subconsciente, esto es, una protesta que sin darse cuenta de ello se le salió de la pluma, o una directa acusación, o una hiriente ironía?… Allí se les daba a entender a los Reyes Católicos, que al mismo tiempo que ellos lanzaban a los judíos de España, enviaban también a un converso a conquistar medio mundo para la corona de Castilla! … Evidentemente aquel viejo lobo marino no pudo contener el impulso de echar fuera de su pecho, algo que dentro no podía él ya soportar! Más tarde un par de grillos y el abandono le harían pagar tan indiscretas frases…”(13)
Carlos Brandt en su escrito, no deja lugar a dudas sobre el origen judío de la familia Colón y de su falsa conversión al cristianismo. Es importante resaltar los valores morales del autor de respeto al libre pensamiento, en ningún sentido se puede interpretar como un intento despectivo del autor hacer estas referencias, ya que este autor poseía amplios conocimientos sobre la religión judía y el sionismo, siendo él mismo quien traduciría los manifiestos de Marx Nordau, fundador del movimiento Sionista, al español, traduciría también al español la obra de pensadores como León Tolstoi y Carlos Marx.
Carlos Brandt, El Misterioso Almirante, Biblioteca Popular Venezolana, Ediciones del Ministerio de Educación Nacional, 1949, citas: 1-pag. 25, 2-pag. 39-40, 3-pag. 58, 4-pag. 58, 5- pag. 59, 6- pag. 61, 7- pag. 45, 8- pag.62, 9- pag. 63, 10- pag. 36, 11- Pag. 24, 12- pag. 122, 13- pag. 57-58
Autora: Gloria Georgette Carvalho Kassar