La Academia de Ciencias Agrícolas de Venezuela (ACAV) impulsa un avanzado proceso de enriquecimiento biológico en la producción de plántulas de café, cacao y musáceas. Tras su propagación inicial en viveros, este material vegetal es sometido a la incorporación controlada de bioinsumos y microorganismos benéficos, un manejo científico que optimiza el desempeño fisiológico y agronómico de las plantas. Estas técnicas permiten incrementar la resiliencia de los cultivos frente a factores de estrés y aseguran una mejor adaptación al momento de su establecimiento definitivo en el campo.
El proceso de fortificación varía según el rubro para garantizar resultados específicos y de alta calidad. En el caso del café y el cacao, la inoculación se realiza con micorrizas nativas y Trichoderma spp., sumado a la aplicación de ácidos húmicos y fúlvicos que favorecen la absorción de nutrientes. Para el plátano Hartón AAB, se incorporan consorcios microbianos que fortalecen el sistema radicular y protegen la sanidad vegetal desde las etapas más tempranas del desarrollo. Estos componentes biológicos son fundamentales para reducir la dependencia de insumos químicos y promover un modelo de agricultura sustentable.
Capacidad Productiva y Variedades de Élite
Todo el material vegetal se produce en la Casa de Cultivo de la ACAV, una infraestructura científica equipada con sistemas de riego por aspersión y nebulización que tiene una capacidad estimada de hasta 120.000 plántulas al año. Actualmente, se trabaja con variedades de alto valor estratégico como el café Monteclaro, el cacao criollo moderno proveniente de plantas élite seleccionadas en Barinas y musáceas del tipo plátano Hartón. Con esta iniciativa, el Gobierno Bolivariano, liderado por el presidente Nicolás Maduro, reafirma su compromiso con la transferencia de conocimiento y la innovación para alcanzar la soberanía alimentaria con respeto a los ecosistemas.
