Autores: Walmore Vergara. José Arismendi. Centro de Procesamiento Digital de Imágenes. CPDI. FIIIDT.
INTRODUCCIÓN.
La actividad catastral realizada en Venezuela o en cualquier entidad político administrativa de cualquier país, trae como resultado un volumen de información territorial que permite que las instituciones gubernamentales, así como las de carácter privado, pueden llevar a cabo un conjunto de desarrollos necesarios para los habitantes, estas instituciones deben conocer cuáles son sus activos disponibles para poder formular ese conjunto de políticas de planificación y ordenamiento territorial y sin duda alguna el conocimiento del entorno espacial del territorio.
El Catastro en la actualidad no puede ser visto como el tradicional, únicamente como un inventario de los inmuebles de un Municipio con sus características jurídicas, económicas y físicas, en el presente y con el constante dinamismo espacial hace que esta definición sea ampliada a las realidades territoriales de todos y cada uno de los diferentes ámbitos municipales. Dada esta realidad, el Catastro Multifinalitario pasa a repotenciar si se quiere la concepción del Catastro como herramienta generadora de otro tipo de información, como ambiental y social, que permite tomar en consideración una serie de factores y sus manifestaciones espaciales, que de alguna forma han sido producto de la planificación, otras por la misma naturaleza y otras ultimas originadas por la anarquía antrópica prevaleciente en un considerable porcentaje cuando se ejecutan los desarrollos habitacionales con sus respectivos equipamientos urbanos. Esto sin duda alguna, ha traído en consecuencia un sinnúmero de situaciones que han afectado considerablemente a sus habitantes, debido fundamentalmente al desarrollo de infraestructuras en áreas donde las amenazas naturales, la vulnerabilidad y el riesgo, no son considerados con la debida responsabilidad, en consecuencia los resultados ante cualquier evento natural son lamentables desde el punto de vista material y humano.
En el mismo contexto, el termino Multifinalitario agregado al Catastro, cada día toma más vigencia, pues no únicamente, lo jurídico, económico y físico, sino también,”… un conjunto de datos alfanuméricos y gráficos vinculados y georreferenciados a la parcela, que nos brinda información de datos sociales, demográficos, ambientales, de zonificación que conforman la base de la información para la planificación y la gestión medioambiental.” (Balbo, El Catastro Multifinalitario: un estudio exploratorio, 2009).
DESARROLLO.
Llevar a cabo la actividad catastral en todo su contexto, implica involucrar un conjunto de actividades entre ellas la sectorización que exige tomar en consideración un análisis espacial de todas y cada una las variables (ambientales, socioeconómicas, demográficas,) inmersas e interrelacionadas de la entidad donde tenga lugar la sectorización (municipio); esta delimitación se realiza en función de los tipos de uso a los cuales son destinados, por ejemplo : residencial, comercial, industrial, deportivo, cultural, educativo, turístico, de esparcimiento, militar. El producto de toda esta información es recopilado y analizado para posteriormente ser plasmada en un formato digital, según sea el caso y el uso de la geotecnología de cada oficina de Catastro. Esta sectorización permite y facilita establecer a la Oficina Municipal de Catastro las normativas de uso, además de fijar impuestos urbanos, precios y valoraciones de los inmuebles de acuerdo a su tipología de uso, además la información permite que las instituciones del estado, ( Venezuela) las privadas y personas puedan usarlas de acuerdo a las normativas plasmadas en la CRBV, la Ley de Catastro, Geografía y Cartografía Nacional, que les permita desarrollar políticas de inversión para futuros desarrollos de acuerdo a las tipologías de uso enunciadas en el apartado anterior, pero más aún, permite que el gobierno local y nacional cuenten con información valorativa en términos monetarios como referentes para la aplicación o ejecución de proyectos sociales o ambientales a futuro.
Del apartado anterior se desprende la importancia del Catastro Multifinalitario como herramienta para análisis de riesgos naturales, pues los mismos tienen una clara localización en el espacio y el tiempo, por lo que su expresión más adecuada se lleva a cabo mediante técnicas cartográficas o geomáticas.
La cartografía de riesgos naturales se considera unas de las herramientas más eficaces para la mitigación del riesgo, puesto que pone en evidencia con gran claridad las zonas donde se localizan determinados elementos en riesgo amenazados por algún peligro, sirviendo de base al resto de medidas, como la ordenación del territorio, la gestión del post-desastre; se puede considerar el uso del catastro y la valoración catastral como base para la evaluación de los elementos en riesgo y finalmente del riesgo mismo, y la inclusión de los resultados del análisis de riesgos y de sus factores, en los datos catastrales, retroalimentando el cálculo de la valoración ( Borrero, 1999).
Según el Banco Mundial, desde los años 80 los desastres naturales han causado la muerte de 2 millones de personas y un aproximado de pérdidas valoradas en 3 billones de dólares, el equivalente a un porcentaje del 600%, que expresado en millones representa un monto de 23.000 millones de dólares anuales en la década de los 80, lo que representa para el último decenio 158.000 millones de dólares. (2020, Banco Mundial). Estas cifras alarmantes hacen que los estudios conduzcan a la prevención y mitigación de los desastres naturales en cualquier ámbito físico-geográfico, deben ser considerados como aportes atenuantes en beneficio y salvaguarda de sus habitantes. En este sentido los gobiernos locales y nacionales tienen la obligación de comprometerse a considerar los aportes de las disciplinas o herramientas de la Geomática, a la hora de llevar a cabo políticas de desarrollo destinadas al confort y mejoramiento de la calidad de vida de la población. (Ver Figura 1).
El Catastro Multifinalitario como herramienta brinda una base de datos de información territorial, que permite realizar evaluaciones valorativas de la cantidad de bienes inmuebles que sufran algún tipo de afectación producto de los diferentes desastres naturales, de igual forma proporciona datos para las restauraciones que dieran a lugar y finalmente para las inversiones a futuro, facilitando la asignación de los situados constitucionales destinados a cada región, estado y municipio del país, sin embargo esto no es suficiente, pues uno de los factores más importantes es la escogencia y selección del espacio físico destinado para fines de desarrollo, donde los estudios de relaciones espaciales son en su mayoría subestimadas, es decir no son consideradas las variables que incrementan o mitigan los riesgos, las amenazas y la vulnerabilidad.
A continuación se colocan cuatro vistas aéreas del litoral central venezolano, de la evolución de la ocupación del fondo del valle del rio Carmen de Uria por asentamientos humanos, en un espacio geográfico bajo amenazas de flujos torrenciales. De allí se puede extraer la base de datos territoriales para realizar la evaluación valorativa de la cantidad de pérdidas en inmuebles, por ejemplo.
CONCLUSIONES.
Las aplicaciones del Catastro Multifinalitario son enormes, la experiencia ha demostrado que un catastro “nunca muere”, siempre será una fuente de información que permitirá conocer la realidad inmobiliaria, en una dimensión temporal amplia del territorio y de sus pobladores, mantener la actualización catastral conlleva a que las instituciones que tiene que ver con el ordenamiento territorial y con la propiedad inmobiliaria pueden dar respuestas a las manifestaciones espaciales; sin embargo, estas generan una gran cantidad de información que tiene que ser vista y analizada de una forma integral cada variable, bien sea en el campo de la planificación territorial o ambiental, que no sea considerada en forma interrelacionada, pues si bien es aislada, da como respuesta una manifestación negativa, alterando la armonía natural del resto de las variables involucradas.
En el caso inmobiliario, los desarrollos tanto habitacionales como de otra índole, deben ser ubicados en áreas previamente estudiadas por equipos inter y multidisciplinarios, garantizando de alguna forma la mitigación de los riesgos, en concordancia al contenido en este apartado. Molina, A, en su artículo, (Catastro
Multipropósito sostenible: una necesidad inaplazable,) señala lo siguiente… la institución catastral debe integrarse, ser el catalizador de modernización de la administración tributaria, geomática y jurídica para el uso múltiple de la información por las diferentes administraciones, particulares y empresas.
BIBLIOGRAFIA.
- Alcazar, M. (2007). Catastro, propiedad y prosperidad, Ed. Universidad de Jaén, España.
- Balbo, E. (2009). El Catastro Multifinalitario: un estudio exploratorio. Cuadernos del Instituto. AFIP, Argentina.
- Borrero, S. (1999). The Economic and Social Justification for Cadastral Reform: The Latin American Ex perience. International Conference on Land Tenure and Cadastral Infrastructures for Sustainable Development, International Federation of Surveyor, FIG; Melbourne, Australia.
- Castillo, T, (2007). Riesgos Naturales Y Cartografía Catastral. Departamento de Ingeniería Cartográfica y Fotogrametría. Universidad de Jaén, España
- Dirección General del Catastro de España. Revista Catastro. Madrid, España. <http://www.catastro.meh.es/esp/publicaciones.asp>.
- Invertir en La Resiliencia Urbana, Banco Mundial, 2020. Documento en línea: Disponible en [https://www.bancomundial.org] [ Consultado en julio 2020]
- Molina, A. (2015). Catastro multipropósito sostenible: una necesidad inaplazable. Revista Cartográfica No, 91. España.
- Sanabria, J.I. (2005). Deslaves en el Litoral del estado Vargas, caso de estudio: La Cuenca del Carmen De Uría. Consultado el 25 de Agosto 2020.
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