Estado del Arte para la Conceptualización de un Centro de Innovación Textil Venezolano

Autores: Miriam Suárez , Neyla Camacho  Centro de Tecnología de Materiales.

 

RESUMEN

Con base a la necesidad de potenciar el sector textil venezolano, como elemento significativo de generación de empleo y promotor del emprendimiento, y en aras de acompañar técnicamente los esfuerzos del sector público y las cooperativas socio-productivas, ha sido propuesta la conceptualización de un centro de innovación textil (CIT) que posea las capacidades y herramientas de asistencia técnica e innovación que consoliden los objetivos-país y fortalezcan el sector textil en Venezuela. Existen metodologías de valoración de la innovación en distintos sectores industriales (Klette y Kortum, 2004), que contemplan que la tasa de innovación de productos, sea un producto nuevo o uno existente generado con una mayor calidad, depende del esfuerzo en la investigación, del conocimiento y las herramientas disponibles. El diagnóstico que se ha generado hasta ahora, exhibe un sector bastante deprimido desde la producción del algodón hasta la confección de prendas de vestir y otros productos terminados, incluyendo el área de formación de técnicos y profesionales. Los resultados indican que las zonas productoras de algodón por excelencia son Guárico y Barinas; sin embargo, en el eslabón de textil y confección las industrias se concentran hacia la Región Central, principalmente Miranda y Aragua. Por tal razón, la ubicación del CIT pudiera plantearse en principio en esta zona geográfica. El estudio realizado refleja un sector textil con potencial de desarrollo en todos los eslabones de la cadena, con una necesaria inversión para reactivarlo, que incluye la implementación de un CIT que acompañe en la formación y capacitación de nuevos profesionales y en el desarrollo de nuevos productos, que le den valor agregado y competitividad a nivel internacional.

INTRODUCCIÓN

La industria textil es el sector de la economía dedicado a la producción de fibras, hilos, telas y su confección en general. Sus productos son bienes de primera necesidad y de consumo masivo, lo que dinamiza su industrialización y mantiene una sustantiva demanda de puestos de trabajo.

En Venezuela, el sector textil ha reducido el número de empresas y en consecuencia el número de puestos de trabajo, ya que las asociaciones textiles venezolanas como la mayoría de las industrias del país, deben competir con las importaciones, pasando de ser empresas productoras a empresas importadoras. Según la encuesta industrial del 2007 y el directorio de establecimientos industriales, existían 68 empresas dedicadas a la producción en el sector textil. En contraste para el año 2009, se identificaron 9030 empresas importadoras [1].

Los sectores productivos públicos, privados y de capacitación, no han coordinado esfuerzos en la inversión de tecnologías para la formación de la mano de obra, para dar cumplimiento a los planes de abastecimiento nacional y para alcanzar ser competitivos a nivel internacional. El potencial de la industria textil y de confección venezolana, se encuentra parcialmente paralizado para la producción de textiles (hilados – tejidos) y la manufactura de prendas de vestir no cubre la demanda nacional. Al mismo tiempo, debido al abandono del trabajador calificado y su migración a la economía informal, los servicios de laboratorios no son accesibles, generando que los esquemas de normalización, gestión de normas de calidad y aseguramiento de las mismas no se cumplan en cada uno de los eslabones productivos de la cadena. Esta realidad impide garantizar una mayor calidad y valor agregado a materias primas, procesos, productos intermedios y productos elaborados a todo lo largo y ancho de la cadena de producción.

Toda la problemática mencionada hace que el sector textil venezolano no genere productos y procesos innovadores acordes a las necesidades de la demanda nacional.

De acuerdo a todo lo expuesto anteriormente, los principales problemas que presenta el sector textil pueden resumirse de la siguiente manera: baja producción de fibras de algodón y artificiales, deficiencias en la tecnología aplicada en los procesos y baja calidad de los productos manufacturados, lo que demanda programas de investigación e invertir en innovación para mejorar el parque industrial textil.

Existe una gran cantidad de estudios que concluyen que la I+D+I contribuye de forma significativa y positiva al crecimiento de un determinado sector industrial o empresarial, bien sea en términos de aumento en las ventas, en la producción, en la productividad, en el valor de mercado de la empresa o en los beneficios del sector (Klette y Kortum 2004) [3].

Según estos autores, la tasa aleatoria de llegada de una innovación de producto, sea un nuevo producto o uno existente generado con una mayor calidad, depende de un elemento de investigación y de un capital de conocimiento. El elemento de investigación es una combinación de las herramientas necesarias para la innovación (incluidos todas las labores de producción, teñido, bordado y tejeduría), la inversión en tecnología a través de la importación de bienes de capital, y la disponibilidad de trabajadores calificados para dichas labores. Mientras que el capital de conocimiento se interpreta como el número de productos que posee la empresa, resultado de innovaciones anteriores y de relaciones con clientes en el mercado internacional que transmiten nuevas tendencias en el desarrollo de nuevos productos y tejidos [4].

El Estado Venezolano ha identificado fortalezas y oportunidades en torno al tema textil, en consecuencia, la Fundación Instituto de Ingeniería para Investigación y Desarrollo Tecnológico (FII) se plantea la Conceptualización de un Centro de Innovación Textil (CIT) orientado a servicios, productos y procesos acorde a las necesidades del este sector productivo textil, a lo largo de la cadena, con transferencia de tecnología y capacitación.

El CIT requerirá de una infraestructura para investigar y desarrollar tecnologías orientadas a solucionar los problemas, para la proyección de procesos productivos de la cadena industrial del algodón y sus mezclas con relación a la cantidad, calidad y precios en el mercado nacional, generación de fuentes de trabajo con transferencia de tecnologías sobre procesos y productos, para avanzar a la consolidación del Conglomerado Textil Venezolano. Este Conglomerad cuenta con oportunidades de financiamiento y estrategias de distribución por compras del estado, pero adolece de asistencia técnica para el mantenimiento de maquinarias que le brinde sostenibilidad y de procesos de innovación que hagan más atractivos sus productos y más eficiente sus procesos.

OBJETIVO GENERAL

Elaborar la Conceptualización del Centro de Innovación Textil Venezolano, acorde con las necesidades locales y como motor del socialismo productivo.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS

1. Identificar los esfuerzos, planes y necesidades, tanto públicos como privados, vinculados al conglomerado textil, así como las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas (FODA) de toda la cadena productiva, desde el sector agrícola hasta confección.

2. Estudiar y evaluar la factibilidad de implementación del Centro de Innovación Textil Venezolano: establecer aspectos económicos asociados a su instalación y valorar el impacto social de su localización en el área geográfica seleccionada.

3. Definir las líneas de investigaciones técnico-productivas y de capacitación relacionadas con el sector textil que garanticen la apropiación, generación y transferencia de tecnologías que fortalezcan la innovación de los productos y procesos del área.

METODOLOGÍA

1. Se realizará un diagnóstico nacional del sector textil, tanto público como privado, a través de entrevistas directas con la industria y la oferta de formación académica asociada, para elaborar una matriz FODA general del sector.
2. Se revisarán las tendencias tecnológicas en materia textil y se estudiarán experiencias de centros de asistencia al sector textil en otros países.
3. Se esbozarán, para validación preliminar, los servicios de asistencia técnicas que deben incorporarse en el centro de innovación textil, así como las líneas de investigación vinculados a las oportunidades-país

ESTADO DEL ARTE DEL SECTOR TEXTIL VENEZOLANO (AL 2017)

Este proyecto actualmente se encuentra en la etapa de diagnóstico; es decir, se encuentra en ejecución de las actividades contempladas para el logro del primer objetivo y que incluyen la evaluación del sector textil a nivel nacional, la caracterización de los actores en todos los eslabones de la cadena textil en Venezuela, la identificación de capacidades nacionales de formación de talento humano en el área textil a nivel nacional y detectar necesidades de adiestramiento.

De acuerdo al diagnóstico realizado al sector textil y de confección industrial, generado a través de entrevistas directas a empresas públicas y privadas y el INCES Textil Maracay, así como data proporcionada por el INE, MPPIC y MPPAT, se determina el siguiente problema: las empresas adscritas al sector público (conglomerado textil, Invetex, empresas comunales, EPS Algodones del Orinoco) y el sector privado, exhiben un estado de abandono en áreas específicas como: formación, investigación, servicios y producción, especialmente entre las pequeñas y medianas empresas para el mejoramiento de su calidad y eficiencia productiva para poder cumplir con los planes de abastecimiento nacional, con base a nuestro consumo per cápita.

Estas pequeñas y medianas empresas en su gran mayoría (37%) se encuentran agrupadas en el Conglomerado Textil, el cual fue creado para la articulación e integración de los procesos productivos del sector textil: confección industrial, fundamentado en los principios de cooperación, solidaridad y complementación (Articulo 6 numeral 18, ley orgánica del sistema económico comunal).

Para el año 2013, el Conglomerado Textil estaba conformado por: 1,8% hilanderías, 1% textileras y 97% confección. No hubo plan de articulación ni capacitación de actores, y se evidenció un déficit de insumos para confección.

En la figura N°1 se exhibe la cadena de la producción textil en Venezuela desde la producción del algodón hasta la confección.

Actualmente, la producción en todos los eslabones de la cadena se encuentra prácticamente paralizada. Por lo tanto, es importante reactivarla por muchas razones: la creación de fuentes de trabajo dignas y bien remuneradas, ahorro de divisas, fabricación de productos de buena calidad y su comercialización a precios bajos.

Figura 1. Cadena de la Producción Textil en Venezuela.

En la figura N° 2 es presentada la distribución de las zonas productoras de algodón en Venezuela.

De acuerdo al estudio realizado, fueron identificadas 14 plantas en zonas productoras o con potencial de producción de algodón. Estas plantas instaladas tienen una capacidad para desmotar 100 mil toneladas de algodón en rama y genera 1000 empleos directos y 3 mil empleos indirectos.

Los llanos centrales y occidentales están entre las zonas con mayor producción por las características de sus suelos. Los suelos arcillosos tienen una gran capacidad de retención de agua, en consecuencia, son idóneas para el cultivo del algodón.

El algodón que típicamente se cultiva en Venezuela, se caracteriza como ´bueno o suficiente´ en relación al largo y al espesor para el 80% de su uso (denim, dril, franelas, toallas y sábanas). El rendimiento del cultivo en Venezuela (debido a la degradación de la semilla) está por el orden de 1,5 t/Ha. Todo el eje Orinoco-Apure tiene potencial algodonero.

En la siguiente figura se presentan las potencialidades encontradas en cuanto al sector textil (procesamiento de la fibra del algodón y sus mezclas):

Existen 265 plantas instaladas en el país que generan 12.307 empleos directos y 30.000 indirectos. El consumo real de textiles en Venezuela está alrededor de 6 Kg/persona/año, equivalente a un total de 221.000 t/año, de esto aproximadamente el 85% es algodón, de manera que en Venezuela se consume aproximadamente 190.000 t/año. Para el año 1989, en el país se producían 60.000 t/año y para el año 2008 la producción había disminuido a 5.000 t/año.

Las potencialidades de la industria textil venezolana en el sector confección (último eslabón de la cadena de la producción textil), se presenta la figura N°4

Existen una gran cantidad de empresas dedicadas a la confección, sin embargo, la importación de piezas acabadas ha mermado el desarrollo de esta parte de la cadena, haciéndola cada vez menos competitiva y castigando así la producción nacional. El principal problema que presentan es el bajo suministro de materias primas para la confección de las prendas.

De acuerdo a este diagnóstico preliminar de la situación actual del sector textil en Venezuela y dada la necesidad de reactivar la cadena productiva, los objetivos del CIT deben estar dirigidos a brindar apoyo a las empresas textiles en cada uno de los eslabones de la cadena, en las áreas técnicas y de gestión. Estos objetivos pueden ser agrupados en tres categorías:

1. Asesorar a las empresas del sector textil en la planificación e implementación de técnicas de producción, de gestión de calidad y de manejo administrativo, con equipos de profesionales especializados.
2. Realizar servicios de producción a las empresas del sector textil en relación a evaluación de materia prima, control de calidad y desarrollo de nuevos productos, y transferir la tecnología de estos servicios mediante la capacitación y el asesoramiento.
3. Capacitar a empleados, supervisores y administradores de las empresas del sector textil con base a planes curriculares elaborados en función de las necesidades de desarrollo.

En relación a la formación en el área textil, se determinó que no existe en Venezuela una institución que forme a técnicos y profesionales en esta área y ninguna universidad tiene en su pensum de estudios o una carrera dirigida a la formación de ingenieros textiles o equivalentes. El INCES a través de cursos técnicos, ha tenido la responsabilidad de formar personal en esta área y tiene instalaciones importantes en el país, en particular en Maracay, aptas para su utilización como centro de investigación.

Por sus características, la Región Central es el sitio geográfico por excelencia para el desarrollo del sector textil. Sin embargo, este centro de formación del INCES se encuentra prácticamente inoperativo; debido a la falta de mantenimiento preventivo y correctivo de los equipos y obsolescencia y desmantelamiento de las maquinarias utilizadas en el proceso de enseñanza- aprendizaje y falta de personal (instructores) con experticia en el tema textil.

CONCLUSIONES

• Hasta ahora, el proyecto se encuentra en una fase exploratoria, en la cual se ha determinado el estado del arte de la situación del sector textil en Venezuela.
• Esta fase de diagnóstico, ha permitido obtener el censo de la cantidad de empresas que se encuentran en el sector en lo relativo a toda la cadena productiva del algodón, desde su cosecha hasta su distribución como producto final o terminado.
• Las zonas productoras de algodón por excelencia son Guárico y Barinas (eje Orinoco –Apure). Sin embargo, en el eslabón de textil y confección las industrias se concentran hacia la Región Central, principalmente Miranda y Aragua. Por tal razón, la ubicación del CIT pudiera plantearse en principio en esta zona.
• Se debe determinar el estado del arte de las potencialidades que tiene el país en cuanto al desarrollo de fibras sintéticas (poliéster, nailon, entre otras), como materia prima complementaria a la fibra del algodón.
• El CIT se plantea como una alternativa en el desarrollo de nuevos tejidos y así impulsar del sector textil en Venezuela desde la I&D (a lo largo de la cadena productiva).

REFERENCIAS

[1] Dirección de Investigación y Fomento, Ministerio del Poder Popular para Ciencia, Tecnología e Industrias Intermedias. (Mayo 2010). Informe Preliminar de Evaluación de los niveles de concentración del sector textil.

[2] Ministerio de Educación, Viceministerio de Ciencia y Tecnología, Bolivia. (2012).  Estudio a Diseño Final del Centro de Tecnología e Innovación – Complejo Textil”

[3] Klette, T. & Kortum, S. (2004). Innovating firms and aggregate innovation. Journal of Political Economy. N°112.

[4] Consorcio de investigación económica y social, CIES. (2010). Innovación empresarial y comportamiento tecnológico sectorial. Perú. pp 450.

[5] Fondo de desarrollo algodonero (1984). El Algodón en Venezuela

LISTA DE ABREVIATURAS

CIT: Centro de Innovación Textil

FII: Fundación Instituto de Ingeniería

FODA: Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas

Ha: Hectárea

I+D+I: Investigación, Desarrollo e Innovación

INE: Instituto Nacional de Estadística

MPPAT: Ministerio del Poder Popular para la Agricultura Productiva y Tierras

MPPIC: Ministerio del Poder Popular para la Industria y el Comercio.

t: Tonelada

 

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